Con todas las dificultades que se va teniendo por la pandemia, y lo mucho que intenta hacer Cáritas , el 11 de Febrero recibimos de "La Unión Alcoyana" por medio de Dori, un donativo de 650 €. para ayudar a distintas familias. Gracias por esa sensibilidad @UnionAlcoyana

9º DÍA DE NOVENA (Viernes 27 Nov) - Fiesta de la Milagrosa

8º DÍA DE NOVENA (Jueves 26 Nov)

7º DÍA DE NOVENA (Miércoles 25 Nov)

6º DÍA DE NOVENA (Martes 24 Nov)

Por problemas técnicos no se ha podido grabar el video

5º DÍA DE NOVENA (Lunes 23 NOV)

4º DÍA DE NOVENA (Domingo 22 NOV)

3º DÍA DE NOVENA (Sábado 21 NOV)

2º DÍA DE NOVENA (Viernes 20 NOV)

1º DÍA DE NOVENA (JUEVES 19 NOV) 

RECURSOS PARA NIÑOS

RECURSOS PARA MAYORES

Un ratito con el Señor

REFLEXIÓN DOMINGO 30º T.O.

Este domingo las lecturas nos recuerdan la esencia de la actitud cristiana que es mostrar que amamos a Dios amando al prójimo. Estamos en unos domingos de controversias de los fariseos, saduceos y autoridades judías con Jesús. Le han realizado preguntas para ponerle en un compromiso en sus respuestas y desacreditarle (como con los impuestos al Cesar; como con el tema de la Resurrección de los muertos, que los saduceos no creían , y la vida eterna...) Hoy la pregunta es sobre cuál es el principal mandamiento de los 613 preceptos que tenía todo creyente hebreo. La verdad es que tenían todas las de ganar los qu ele preguntaban a Jesús, pues contestara lo que contestase, y dijera el mandamiento que dijera, ellos podían contrarestarle diciendo que en tal escuela rabínica decían tal otro mandamiento. Hasta el punto que habían escuelas rabínicas que decían que el mandamiento más importante no estaba explícitamente escrito en esos 613 sino era una síntesis de todos (Dar culto a Dios con nuestra vida y honrarle en el templo, su casa) Jesús ante tal situación, no quiere sólo contestar , sino hacer reflexionar con profundidad y mostrar que la fe en Dios no nos pide cumplir sino vivir y descubrir el rostro de Dios, siendo para ello necesario descubrir el rostro del hermano como un prójimo 

En esta respuesta de Jesús sobresale dos palabras "amar" y "prójimo". Respecto a esta última, prójimo para los judíos no era cualquier persona, sino que para ser prójimo tenía que pertenecer al pueblo de Israel, y estar dentro de la Ley. Por eso tanto el sacerdote y el Saduceo de la parábola del Buen samaritano no tenían cargo de conciencia porque el que estaba tendido en el suelo mal herido no era del pueblo de Israel, sino Samaritano, por tanto no era prójimo del israelita. Jesús rompe esta idea de prójimo. El habla de hacernos prójimos al otro. De descubrir que toda persona sea o no del pueblo de Dios, es prójimo tuyo, pues todo hombre es "Tierra Sagrada" es reflejo del amor de Dios, y por tanto, lo que hicisteis a uno de estos mis humildes hermanos a mí me lo hicisteis ..., es decir al hacerlo al otro, se lo hacemos a Dios. Respecto a la palabra "amar", Jesús también rompe esquemas, pues no es un amor de correspondencia; no es un amor adolescente y posesivo; no es un amor de afecto... sino un "amar" de servicio, de entrega desinteresada, que hace libre al otro, hasta el punto de aceptar su negativa, su rechazo (como Dios lo hace con nosotros). Un amor que crea vida, entregando la tuya y sin pedir que te corresponda de la misma forma. Un amor que es capaz d renunciar a tus derechos por muy lícitos que sea, sólo por beneficiar la vida del otro, por ayudarle a tener más vida, más digna, más esperanza. Este amor solo se puede vivir si lo experimentamos primero de Dios. Y Dios continuamente te lo está ofreciendo. 

REFLEXIÓN TODOS LOS SANTOS

En la fiesta de "Todos los Santos" celebramos múltiples aspectos: La santidad de Dios reflejada en sus hijos (los santos de la Iglesia); la plenitud de la vida cristiana que consiste en alcanzar a Dios y esto lo hace posible si nuestra vida se deja orientar por las bienaventuranzas; y la comunión eclesial con nuestros hermanos que ya gozan de Dios. No se trata de recordar simplemente a los santos, sino el descubrir que la santidad de Dios, la vida de Dios se hace realidad ya aquí en este mundo, en creyentes como tu y como yo, si abrimos de par en par las puertas de nuestra vida y de nuestro corazón a l Señor.

Los santos nos demuestran que son personas que tienen "los pies en el suelo", que perciben la dificultad de la realidad y que intentan mejorarla con el estilo de Jesús. Así todos los santos tienen gran madurez personal, tienen un amor entregado por los demás, inconformista, activo... están vacíos a su propio yo y disponibles ante las exigencias y las propuestas de Dios. El Señor nos llama a la felicidad, a ser libres plenamente y para ello nos orienta las Bienaventuranzas, que nos lleva a enfrentarnos a nuestros miedos y a poner nuestra confianza en Dios 

También recordamos los santos de cada día, los que no tienen altares, pero ejercen su santidad con su conducta. En la vida misma, la de cada día es donde se fragua la santidad. Los santos son aquellos que se dejaron y se dejan moldear por el amor, porque, saben que es lo único que les puede hacer felices de verdad; dándose cuenta a la vez que, si lo comunicaban a los de su alrededor, podían hacer felices también a otras personas. Los santos son los que no saben qué es eso de la humildad, porque para ellos eso de ser los últimos es lo más normal y natural, pues les sale de dentro. Los santos son aquellos que, sin dar voces ni hacer ningún aspavientos, apuestan por la palabra y el diálogo para aportar al menos un poco de solución a los conflictos, roces y enfrentamientos familiares, de amistad, de vecindario, de pueblo y de barrio que tanto destrozan la convivencia diaria. Los santos son aquellos que incluso en medio de tanta tirantez, tensión y crispación creen que hay que apostar por renunciar a la condena y al castigo como sistemas a la hora de corregir; y apuestan por poner al menos algunas dosis, de perdón y de misericordia. Son aquellos que creyeron y siguen creyendo que a nadie se le puede negar nunca una oportunidad, ni tampoco se le puede decir "que esta es la última oportunidad". Estos son los santos del día a día. Para ellos el mejor de los altares fue su conciencia. Y el único y gran devoto, el Dios del amor que creyó en ellos desde el principio y lo continuará haciendo por toda la eternidad 

1-. La parábola de hoy del banquete de bodas no hay que entenderlo al pie de la letra. Cuando Jesús emplea una parábola es para transmitir una verdad de salvación, para llamar la atención por las reacciones de los personajes, o para que nos sorprenda y descubramos un nuevo sentido en nuestra relación con Dios o con los demás. Esta parábola tenemos que tener mucho cuidado en identificar a Dios con ese rey. Lo que hace Jesús es utilizar una imagen de Dios que entendían los fariseos, saduceos y autoridades judías. Una imagen que se asumía en el A.T. de un Dios que entra en cólera, si su pueblo no responde adecuadamente, que castiga si no se sigue sus caminos, que destruye si no corresponde al amor de Dios. Esa imagen para acercarnos a Dios en un principio es suficiente para descubrir que Dios emplea actitudes y sentimientos que nosotros entendemos en nuestras relaciones. Pero Jesús en el evangelio demuestra que profundizando un poquito en el corazón de Dios, Dios no actúa así, Dios es Padre, que espera, que es perseverante, que usa misericordia, que quiere que el pecador se convierta, que está a favor de los más débiles. Lo importante de la reacción de ese rey es su persistencia en la invitación y su insistencia a pesar de nuestros "noes" a dejarnos encontrar por Él. Lo importante es que quiere que entre en ese festín todos, buenos y malos, y lo asume preparándonos incluso a todos un traje de fiesta, que es su amor y salvación.

2-. La invitación de este rey es a no dejarnos llevar por el confort, por las cosas de este mundo que nos aleja de esa fiesta que es el Reino de Dios, que nos inunda de felicidad, que nos ofrece un sentido pleno de la vida... Los primeros invitados no aceptaron la invitación por darle más importancia a los negocios, a las tierras, a la comodidad... Nuestra fe nos ayuda a descubrir que Dios nos llama a darnos, a comprometernos, a servir... cuánto más nos damos más sentido cobra la vida, más se plenifica nuestra existencia. Cuánto más nos centramos en nosotros, en nuestras cosas, más valoramos los bienes de este mundo, más se vacía nuestra vida, más insulsa se convierte nuestro peregrinaje por este mundo. Dios nos invita a aceptar su invitación a vivir una vida llena de entrega, de novedad, de cuidados de Dios... 

3-. Dios nos llama al banquete con Él no por lo que hacemos o por conforme le correspondemos a su amor, sino por quienes somos, sus hijos por los que haría cualquier cosa, hasta crucificar su amor, esperar con paciencia nuestra vuelta y dar su vida. No venimos a Dios por nuestros buenos méritos, es Dios quien nos hace sacar lo bueno que El ha puesto en nuestra alma. El nos hace ser buenos. Sin Él nuestra vida languideza en lo insulso, pierde sentido pleno, se vuelve descionfiada y hace salir lo peor de la humanidad, por el egoísmo que se adueña de nosotros. Eso es lo que la parábola decía cuando afirmaba que acabaron con ellos y prendieron fuego

4-. El traje que pide el Rey al comensal lo proporciona el mismo rey. Ese traje es el mismo Cristo. Dios nos reviste con Cristo con su amor y su perdón, con su actitud acogedora, sin una mirada que juzga, sino todo lo contrario una mirada compasiva, fraternal... Aquellos que no quieren revestir su alama con este traje no podrán disfrutar de ese gozo de estar con Dios, de esa humanización que hace surgir Dios. 

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Encíclica Fratelli Tutti

Un primer aspecto es que durante varios domingos estamos tratando el tema de la viña. Si la semana pasada (Domingo 25TO) la viña la comparaba como un trabajo (el dueño llama a trabajar en la viña a jornaleros a distintas horas); esta semana, Dom 26 TO, mira la viña como una misión familiar (un padre que llama a sus hijos a ir a la viña con respuestas diferentes) La semana que viene trataremos la viña como la ocasión de apropiársela por parte de los trabajadores que no quieren saber nada de dar cuentas al dueño que les va enviando emisarios, incluso a su propio hijo.  

Lo particular de esta semana es que entre el pasaje de la semana pasada y este ha pasado muchas cosas. De camino a Jerusalén ha anunciado por 3ª vez la muerte de Jesús, los discípulos han debatido sobre quien será el más importante en el Reino de Dios, han entrado en Jerusalén y Jesús ha realizado el primer gesto profético en el templo. Y los fariseos y ancianos le discuten a Jesús la autoridad con la que hace todo eso. En esta discusión aparece la parábola de Jesús de hoy. Porque lo que esta sugiriendo Jesús es que los dos hijos son reflejo de la división que había en los judíos. Los fariseos, saduceos y escribas pensaban que eran los perfectos cumplidores de la Ley, y por tanto formaban parte del pueblo de Dios y cumplían con Dios. Los pecadores, enfermos, publicanos... eran rechazados por las autoridades que les indicaban como apartados del pueblo de Dios y como castigados por Dios por no cumplir la Ley. Jesús les dice que su reacción es como la de los hijos de la parábola. Ellos (fariseos, ancianos, escribas...) son como el segundo hijo que dicen sí, sí enseguida pero luego no van a l aviña, no están implicados, sus vidas dejan mucho que desear en su intención...Los otros, los excluidos que parecen que rechazan a Dios por sus pecados, cuando toman conciencia son los primeros que desean ir a la viña, como el demostraba con sus curaciones y su perdón a tantos pecadores.

2-. Otro aspecto importante de las lecturas es que esos dos hermanos los tenemos nosotros en nuestra vivencia de fe. A veces le decimos sí a Dios y nuestra conducta diaria muestra que no estamos haciendo la voluntad del Padre. Y a veces oponiéndonos en un principio a los caminos y llamadas de Dios Padre, cuando tomamos conciencia de lo que implica Dios, de lo que nos ofrece, nos convertimos y acudimos a Dios. El único que siempre ha dicho sí y ha realizado la voluntad del Padre es Jesucristo, con su entrega y donación, no sólo en la cruz, sino en cada vivencia de su vida, en cada acontecimiento y encuentro que tuvo con distintos personajes. Jesús y su forma de vivir la relación con el Padre es nuestro modelo de vivir la fe.

El último aspecto es lo que nos sugiere la primera lectura, de Ezequiel. Nos sugiere que cada uno de nosotros somos responsables de nuestras decisiones. No tenemos que echar la culpa a los otros de nuestra debilidad en la fe o de nuestros pecados (no podemos cargar a los otros nuestros fallos: por la incoherencia de los demás, porque nos ha incitado a hacer, porque nos ha provocado, porque no nos han enseñado...) Ezequiel nos muestra que Dios te ha ofrecido libertad para decidir. Qu Él quiere salvar al pecador. Que espera hasta la última ocasión para rescatar nuestra vida del sinsentido. Y que por tanto no solo debes responsabilizarte de tus decisiones en la tentación o el pecado, sino también de si has colaborado por ayudar al otro a que descubra a Dios. Si no haces el bien que ayuda al hermano a descubrir a Dios, también tu tienes parte de que ese hermano pierda la oportunidad de encontrar a Dios.

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PREGUNTA A TU IGLESIA

MOMENTOS DE ORACIÓN CON EL SEÑOR

 Quizás un primer punto que podemos comentar es la necesidad de revisar nuestra manera de vivir la fe en este Dios bondadoso. Si leemos este evangelio de Mateo, esta parábola del dueño que va contratando a lo largo del día nuevos jornaleros, como simple relación laboral y valorando las cosas sólo como un intercambio de bienes (yo doy horas de trabajo, tu me das el sueldo por lo realizado) no entenderemos el sentido de esta parábola, y de lo que Cristo quiere insinuar. La parábola no habla de relación laboral, habla de Dios, del Reino de Dios, de disfrutar con el amor que entrega Dios que es generoso y ofrece más de lo que necesita nuestra vida. Una segunda convicción a revisar es la manera inconsciente como vivimos nuestra relación con Dios. A veces surge ese pensamiento de hacer cosas por el Señor para que Él nos bendiga, nos proteja, nos ayude a tener una vida mejor... Jesús nos muestra un Dios Padre que no actúa así. El no nos da según los méritos que hemos hecho. El está entregándose por nosotros, amándonos, perdonándonos, acompañándonos antes de que nosotros nos lo merezcamos o le respondamos. Nuestra respuesta con nuestras acciones viene después de que Dios se entregue por entero a cada uno de nosotros. Aunque no le respondas a Dios, aunque le falles, aunque le niegues... Dios quiere amarte, y sigue amándote, desviviéndose por ti, ofreciendo toda su vida por ti.

 Un segundo punto sería entender con profundidad la parábola. Como sugeríamos antes, la parábola no está hablando de relaciones laborales, de lo justo o injusto que es hacer más horas de trabajo y recibir menos dinero... Está hablando de Dios, de su amor, de su bondad. Dios no puede, ni quiere dar su amor a plazos o a trozos. El se da totalmente, da su amor pleno, se da completamente. El denario del evangelio es lo que necesitaba una persona para vivir una jornada. El dueño quiere que a nadie le falte para poder sostener su familia durante esa jornada, haya hecho más o menos. Dios también quiere que nuestra vida tenga sentido por eso nos da el amor que da sentido pleno a nuestra vida a todos por igual, hayas hecho más o menos, te hayas acercado a Dios antes o al final de tu vida. El tema de ir a trabajar a la viña no se trata de hacer una misión en e Reino de Dios, sino de disfrutar del Reino de Dios. Cuanto antes lo descubras, antes llenarás tu vida de la luz y el sentido de Dios, cuanto más tarde lo descubras te dará pena haber descubierto y haber podido saborear en esta vida tan poco de ese amor que da sentido pleno y valentía para vivir la realidad con esperanza.

 Las otras lecturas también nos dice mucho, quizás comentar un poco la segunda lectura, la de san Pablo. Cuando escribe esta lectura la escribe en la cárcel y ve peligrar su vida. Piensa que las autoridades judías están presionando para que le castiguen con la máxima pena y esa es morir. San Pablo entonces se debate en un dilema. Si mi vida se acaba ya, de qué temer. Dios me está esperando con la vida eterna, con la Resurrección de Cristo y eso es lo mejor. Si Dios me da más vida, podré seguir alentando a mis hermanos cristianos a tener una vida digna del evangelio de Cristo, ayudándoles a dar sentido desde la fe, a afrontar los problemas con el sentir de Cristo, con esperanza... Tanto una como otra Dios me bendice. A nosotros nos viene muy bien esta reflexión ahora. Porque si creemos de verdad en la resurrección de Cristo... de qué tenemos que temer. El Coronavirus, la enfermedad, las dificultades, si detrás está nuestro Dios ofreciéndonos vida, acompañándonos ... o si tenemos miedo o reparo... no será que no creemos del todo en ese Cristo resucitado. Lo celebramos pero nos cuesta vivirlo en el día a día. Y si Dios nos bendice con más vida, nos inspira y acompaña ayudándonos a solventar todas las dificultades... tendremos más tiempo y ocasiones para mostrar nuestra fe, para vivir y afrontar los problemas con esperanza, sin desesperos, con sentido de Dios.. Una y otra nos hace madurar como personas y como creyentes.  

1-. Del evangelio podríamos destacar tres aspectos que son muy sugerentes. El primero es la pregunta de Pedro. Pedro quiere descubrir qué tipo de baremo utiliza Jesús a la hora de perdonar. Pues en las distintas escuelas rabínicas se señalaba hasta cuánto había que perdonar. Los rabinos más generosos decían que a una persona se la podía perdonar hasta cuatro veces... Pedro pregunta con esa apariencia de magnanimidad diciéndole a Jesús ... hasta siete veces (como dando a entender que era tener un corazón muy grande). Jesús le responde quitando todo límite al perdón. El perdón hay que darlo siempre, sin mirar cuántas veces lo has perdonado.  El segundo detalle es la parábola. Lo que perdona el rey a su criado es infinitamente mayor a la pequeña deuda que tenía aquel compañero con el criado. Es más la deuda con el rey era impagable. La forma de perdonar del rey es la que hace Dios con nosotros, sin poner condiciones, simplemente porque lo pedimos, sin violencia, ni reproche... El perdón debe ser así, sin pedir que el otro se lo gane, sin recriminar el daño que está causando la ofenda o la deuda que ha generado tal acción o gesto. El tercer aspecto es la actitud de los otros compañeros. No se quedan al margen de lo que ven, cuando lo que ven es desmesurado, injusto, inhumano. Intentan, no darle una lección, sino ayudarle a que descubra que su reacción es equivocada y hace mal al compañero y a sí mismo. E intentan ayudarle acudiendo a aquel que le ha mostrado generosidad y una lección de perdón.

Hay una diferencia entre la primera lectura y el evangelio. Mientras que en la primera lectura se pone como requesito para quie Dios perdone , que nosotros perdonemos antes y demostremos que somos dignos de ese perdón. El evangelio nos señala que Dios ya lo ha hecho antes sin pedirnos nada a cambio, con gratuidad. sin tan siquiera pedir que nos lo merezcamos, sin recriminar nada. Así actua Dios con nosotros con su misericordia. 

2-. También vamos a comentar algunos aspectos a tener en cuenta sobre el perdón que nos invita a vivir Jesús, en este evangelio: 

- Es importante tener en cuenta que el perdón no es tanto un acto concreto que hcemos ante una situación determinada. Sino que debe ser una actitud. Debe ser una tendencia, una forma de vivir la vida, no algo esporádico. Lo primero que debe surgir en nuestro corazón, sin cuestionarnos si lo merece o no, es perdonar.

- Dios nos ha creado con una voluntad que es atraída por el bien. El problema es que aduquemos esa voluntad y la deterioremos. Nuestro mundo nos hace pensar continuamente que detrás de todo hay una intención egoísta malvada... Nos hace desconfiar del otro. Da por hecho que la voluntad se inceina más por el mal, el egoísmo, el "machacar al otro para beneficiarme yo" que inclinarse a hacer el bien. La fe nos invita a recordarque el pecado es por ignorancia, por no haber descubierto que eso que te atrae se te presenta como un bien para ti o para los demás y en realidad es algo que perjudicará tu humanidad, tu ser persona, tu vida o la de los otros. Por tanto la misión del creyente es ayudar a abrir los ojos, con caridad, con tacto, sin humillar (como decía lel evangelio de la semana pasada) y el perdón es un instrumento sin igual. 

- La frase "perdono pero no puedo olvidar". No se trata de borrar ese recuerdo que nuestra memoria física retiene. Esto no nos lo pide el Señor, pues eso es condición humana. Lo que nos pide es que no dejemos que ese recuerdo vaya apoderándose de nuestra mirada, que no vaya "engordando"la ira para que solo sea lo único que puede apreciar de la otra persona. Evidentemente que tenemos recuerdo, pero que eso no nuble tu mirada, no cargue tu corazón de juicio. El pasado no puede llevarte a mirar la vida pensando que hay detrás un mal adrede. No dejemos que la herida se vuelva a abrir . No demos cancha a que el enfado se convierta en ganas de hacer mal al otro pra desquitarnos.

- El perdon no puede estar en el ámbito de l sentimiento. Pues estaría en un clima de arenas movedizas.. (un día soy capaz, otro no lo siento, no lo puredo dart...) El perdón es una opción, una elección de vida, porque con el perdíon puedo ayudar a mi hermano. Es más es el salvavidas que puede utilizr mi prójimo para iniciar un cambio en su vida a mejor.

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PREGUNTA A TU IGLESIA

Hoy las lecturas nos transmiten unas convicciones que nos hace mirar más allá de nuestro interés, de nuestra relación personal con el Señor y de nuestro ámbito personal. Una de las convicciones que nos transmite es que Dios le preocupa salvarnos. Su interés es gastar hasta la última oportunidad para rescatarnos de una vida sin plenitud, de una vida desnortada por el desaliento, por los errores, por las decisiones que hieren tu persona y hacen daño a tu alrededor. El no dejará a nadie por imposible. Como le decía al profeta Ezequiel con ese lenguaje duro oriental, el mal del prójimo te compromete. No puedes guardar silencio. No puedes quedarte indiferente, ni al margen de su pecado, de su desorientación. Porque Dios no sólo te pedirá cuentas del mal que has podido hacer, sino del bien que no has realizado a tu hermano, aunque sea avisándolo, corrigiéndolo. A Dios no le importa el resultado, sino la predisposición de hacer nuestro el mal, el error, del prójimo. Podemos preguntar como Caín: "¿Acaso soy yo el guardián de mi hermano? Y Dios nos contestará: - SI. Tu misión es rescatar, hacer lo indecible para que descubra el bien que está perdiendo con esa opción de vida, o esa acción cometida...Otra convicción de las lecturas es el de no quedarnos sólo con el pecado individual. Sino que nos afecta el pecado del otro. Por eso tenemos que ayudarle, tenemos que corresponsabilizarnos con el bien del otro, y con el mal del otro. La fe cristiana no la podemos vivir de forma individualista, cada uno preocupado sólo por sí mismo , por su salvación y bienestar particular. Sin el otro nuestra vida no cobra pleno sentido. Otra convicción es la fuerza que tiene la oración comunitaria. Estamos acostumbrados a potenciar la oración individual. Pero cuando dos o más se reunen en el nombre del Señor y perciben ese bien en común a pedir, Dios está en medio, lo quiere conceder. La oración comunitaria no solo asegura la presencia en medio del Señor, sino que es eficaz y transforma nuestra realidad. Tendríamos que preguntarnos cuando ha sido la última vez que le hemos pedido a un hermano nuestro que nos acompañe para rezar juntos por una situación, una plegaria, una circunstancia de una persona. . 

Uno de los temas que nos invita a reflexionar es el tema de la murmuración, de los chismes, de la crítica al otro y del juicio. Con san Pablo, con esa frase de "A nadie le debáis nada, más que el amor", lo que nos sugiere es si le debemos amor al hermano, un amor como el que Dios ofrece en nuestra vida, nos debe importar que nuestras palabras se conviertan para el hermano en bendición ("hablar bien de él") no tanto en destruir su imagen, su fama, en juzgar o criticar o condenar por lo que hemos visto que ha hecho. Porque el único que puede ver el corazón del otro (las heridas que tiene abiertas, las personas que le han defraudado y le han dejado marca, la intención con la que emprendía esa acción, las cadenas que le atenazan o los miedos que le llevan a defenderse con esas palabras, o esas acciones... el único que sabe ver todo eso es nuestro Dios. Nosotros solo podemos ver una parte incompleta, no podemos ver el bagaje de cuántas vivencias le han afectado en su historia de vida y le impiden ver el mal que está padeciendo. Decía el Papa Francisco que  con frecuencia la calumnia, los chismes, la maledicencia, que, según él, son plagas en la Iglesia  pueden destruir a las personas. Y como hermanos en la fe e hijos de un mismo Padre Dios, no puede darnos igual destruir su imagen, dejarlo en boca de todos, quedarnos solo con lo que hizo mal, o dijo de mal. Como a Ezequiel, el Señor nos pide no solo que no contribuyamos a las murmuraciones o chismes por lo que pudo parecer al verle actuar, o por lo que otros dijeron sobre esa persona... sino que Dios nos pide no guardar silencio, intentar acabar con los chismes, reflejando las bondades y las virtudes que toda personea tien. Y eso pesa más que los errores, o el mal que uno haya cometido. Así lo hace Dios con nosotros.  

Un segundo tema es la . Corrección fraterna. Esto no es solo decirle al otro lo equivocado que está. No se trata entrometernos en su vida y hacer que el otro baje la cabeza y haga lo que yo le diga... No se trata de decirle "las verdades a la cara"Se trata de ayudarle a buscar el bien que esa persona ha perdido por una equivocación, por una visión equivocada del problema o por una mala actuación en su vida. Pero todo ello como lo hace Dios con nosotros: con mucha humanidad, con discreción (como nos muestra el evangelio) sin humillar, acompañándonos con los tiempos que cada uno necesita para abrir los ojos. El otro tiene que sentir que le corregimos no por despecho, sino porque le queremos y queremos ese bien para él que está perdiendo. También nos invita a revisarnos cómo recibimos las correcciones que nos hacen los otros. Es un tema a poner bajo la luz de la oración y pedirle al Señor que no nos dejemos llevar por nuestro amor propio herido, ni por nuestro deseo de imponernos al corregir al otro. 

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Pregunta a tu Iglesia

Hoy las lecturas nos hablan del seguimiento. a Jesús. Quizás muchos tengan otras preocupaciones principales: el coronavirus, la vuelta al cole, los "erte", el paro, la enfermedad... Pero todo esto se vive de forma diferente cuando uno sigue a Jesús. La pregunta que nos tendríamos que hacer es: ¿Cómo me pide el Señor que viva este acontecimiento desde la fe? ¿Qué me está señalando el Señor en esta circunstancia para que le dé sentido y pueda sacar bien de lo que me parece contraproducente, negativo o un mal a priori?... Porque cuando uno tiene a Cristo en su vida, todo se puede afrontar sin perder la esperanza, porque uno se sabe acompañado por Cristo, fortalecido por su presencia, con la certeza que Dios es capaz de sacar un bien de un mal, para que vivamos la vida con un sentido pleno, sin perder el norte sabiendo que el final, como dice san Pablo, para los que creen en el Señor, todo es para su bien (si no nos centramos en nuestro egoísmo y en nuestro individualismo, en nuestra comodidad.... si nos dejamos orientar por el Señor en toda circunstancia). A veces hemos convertido la religión en un paraguas para que nada malo nos pase en la vida. Y Dios no  suele quitar los males , sino que nos ayuda a afrontarlos, a encararlos con una actitud de fe, sabiendo que afrontarlo con sus "armas", con la actitud de Cristo nos puede ayudar a crecer , a madurar, a sacar la máxima riqueza de cada situación que vivimos. Por eso es tan importante cómo sigamos a cristo

Las lecturas nos hablan de seguimiento. La primera lectura de Jeremías ante su misión le lleva a tener un debate interno (una tentación): o guardar silencio para no estar a malas con su pueblo, con la gente a la que ama que es el pueblo de Israel, y no buscarse problemas por lo que le sugiere Dios que profetice y diga a Israel denunciando su mal camino, su lejanía de Dios...; o dejar que ese fuego interno de Dios salga por sus palabras, llevándole a tener problemas, enemistarse con la gente a la que quiere, jugándose la vida... Jeremías al final decide ser fiel al Señor, aunque esto le lleve problemas , pero también experimenta como Dios le sostiene, le protege, le da fuerzas para su misión (lo que dice el salmo 62 sería casi la vivencia de Jeremías)

El Evangelio nos invita a revisar tres cosas de nuestro seguimiento a Jesús: 1-. "Tome su cruz y me siga". La cruz no es renunciar, sino optar por lo mejor. Y esto te llevará a descartar otras cosas que son buenas pero que no te está ofreciendo lo que Dios te presenta para llenar tu vida plenamente. Pero también tenemos que discernir cuál es la cruz que te pide Dios cargar. Porque hay cruces que no son redentoras, ni salvadoras, ni tan siquiera Dios te pide que las cargues, sino todo lo contrario, que te liberes de ellas, porque hunden tu vida, la deshumanizan... Esas cruces que no nos ofrece Dios son las que nos cargamos nosotros  por no ser veraces, por salvar alguna situación agarrándonos a alguna falsedad, o mentira piadosa, por no ser coherentes, o dejarnos llevar por el egoísmo, la comodidad, el ser insensible ante el otro.... La cruz que nos pide Dios cargar es aquella que se produce por ser fiel a los caminos del Señor. Por ser fiel a Jesús y ser coherentes con lo que creemos. Son aquellas que por optar por los valores del evangelio, por tener un sentir cristiano ante la vida, los acontecimientos y el prójimo te llueven críticas, improperios, malas caras, o incluso te juegas tu bien, tu imagen, tu prestigio...

2-. "Tu piensas como los hombres no como Dios": Le crítica a Pedro que le quiera enmendar la plana, que quiera dirigir a Dios lo que tiene que hacer. A veces nuestro deseo de ver resultados inmediatos nos impide confiar en los caminos de Dios, que aunque parezcan difíciles al principio y no se vean resultados al instante, el final del camino vale la pena y Dios es capaz e sacar fruto... Por eso le dice a Pedro ponte detrás. Nuestra misión como discípulo no es decirle a Dios lo que tiene que hacer, d´nde tiene que actuar, sino escuchar a Dios y seguir sus caminos que van a llenar de sentido y plenitud nuestra vida y la de los demás

3-. Negarse a si mismo, no es renunciar y que otros decidan por ti en la vida. Sino optar por un bien mejor. No dejarte llevar por el individualismo, ni el egoísmo o comodidad en tus planes y en tu vida. Sino estar abiertos a que sea Dios el que marque tu horizonte, tu estilo de vivir, tu apertura hacia a los demás

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Después de toda la tarea realizada en Galilea y antes de subir a Jerusalén, Jesús intenta reafirmar el seguimiento de sus discípulos con estas dos preguntas. Haciéndoles ver que no pueden conocerle si no superan lo meramente visible, lo meramente racional o la lógica humana. Si no se dejan llevar por el encuentro vivencial que están teniendo con Él se quedarán a medias en su seguimiento. Contestar que Jesús es como Elías o Juan Bautista, o Jeremías o uno de los profetas, es quedarse con una parte de Jesús, y es una mirada incompleta de lo que está ofreciendo Jesús. Así Juan Bautista ofrecía Penitencia , sacrificio, austeridad... Jesús también lo ofrece pero después de haber descubierto el amor que Dios nos tiene y cómo ese amor te lleva a despojar tu vida de determinadas actitudes que menguan ese amor. Compararle a Jesús con Elías es cómo decirle que Jesús basaba su mensaje en le temor, en la denuncia, en el señalar lo ridículo de algunas posturas... es cierto que en determinados momentos Jesús se enfrenta a los fariseos y saduceos diciéndoles sois sepulcros blanqueados", o "será el llanto  y rechinar de dientes", pero sin olvidar que antes ha mostrado la comprensión y misericordia para quien quiera aceptar su acogida, su misericordia, su perdón... Es decir con esas figuras lo que sugiere es que la gente se ha quedado con una parte de Jesús, no con "todo Jesús". Nosotros a veces podemos tener esa tentación quedarnos con una visión parcial de Jesús, la que nos interesa, la que más nos gusta, la que menos nos complica la vida.... Pero eso no transforma, ni sostiene nuestro vivir. Si queremos descubrir como Cristo es razón de nuestra vida, tenemos que ver su compasión y su exigencia, su acogida y su denuncia profética, su acogida de lo humano y su propuesta de vivir lo divino...

La respuesta de Pedro es una respuesta vivencial, que le implica, le compromete. Es una respuesta de lo que él está viviendo con Jesús. Esta es la respuesta que Cristo nos pide a nosotros con esa pregunta que también nos hace a cada uno de nosotros. Porque si decimos que Jesús es centro de nuestra vida... las otras realidades no pueden ocupar ese centro (trabajo, ocio, comodidad, familia) Esto no quiere decir que infravaloremos lo demás, sino que desde Jesús lo otro se valora mejor, se vive mejor, se orienta y se le da el peso adecuado y justo. Si decimos que Jesús es misericordia, no puede haber en nuestra vida intolerancia, incomprensión, rencor ... intentaremos tener la misma actitud de Jesús. Si decimos que Jesús es mi salvación, mi roca donde se sustenta mi vida... no podemos tener una vida que al menor contratiempo se viene abajo, una vida desconfiada, pesimista... pues estaríamos diciendo que esa Roca en la que se cimienta mi vida no es fuerte, no alberga suficiente sostén para mi vida. Por eso para contestar a la pregunta de Jesús hay que hacerlo, no con las verdades aprendidas, ni con palabras, sino con tu vivir y tu obrar. ¿Qué dice de Jesús tu vida? ¿Qué dice de Jesús tus obras?, Qué muestra tus proyectos sobre Jesús? ¿Que te fías de él, que tienes sus criterios, que buscas aplicar sus actitudes en ellos?

Tras la respuesta de Pedro ay cuatro rasgos a destacar: 1-. "Eso no te lo ha revelado nadie de carne y sangre, sino mi Padre del cielo..." para vivir a Cristo y descubrirle, es necesario que Dios nos conceda saber mirar y nos conceda saber escuchar. El nos lo da, pero nosotros tenemos que saber recibirlo, atenderlo. Por eso es tan importante la escucha, que no es sólo oír. Escuchar es oír la Palabra de Dios, lo que dicen los acontecimientos de la vida, asumir lo que están diciendo y aplicarlo en tu vida, hacerlo realidad con tus actos y tu obrar. Dios te susurra cada día, ¿lo sabes apreciar? 2-. Jesús ofrece una nueva misión a Pedro simbolizada con el cambio de nombre. Y la misión que le da a Pedro no es porque es el más preparado, el que más cualidades tiene de los discípulos... . La misión no depende de la santidad del receptor, sino de cómo nos ama Dios y cómo sabe que dándonos esa misión, transformará nuestra vida, y hará germinar semillas de Reino de Dios con nuestra implicación y nuestro servicio.  3-. Las llaves no son signo de prestigio, ni de poder, sinnoque otorga la capacidad de comprensión y de abrir el mensaje para que otros lo puedan descubrir, saborear y vivir. Las llaves le ofrecen a Pedro una responsabilidad no de sobresalir sobre los otros, sino de actuar como Dios actúa con él, con actitud de Padre, con amor acogedor. Como en la primera lectura le dice a Eliaquín te doy la llave del palacio para que actúes como padre  para los habitantes, para que te conviertas en su servidor. 4-. El tema de la Iglesia (y el poder del infierno no la derrotará) sabiendo que en la Iglesia se combina lo humano (con debilidades, incoherencias, errores al actuar...) con lo divino (Dios es el que está edificándola, el que la sostiene, el que no deja que se derrumba. Hará reformas, podará su viña en la Iglesia, pero no morirá . Por eso tenemos que estar agradecido por la Iglesia, que a pesar de su humanidad, y sus errores, sigue ofreciéndonos la vivencia de Dios, el proyecto de Reino de Dios. Dale gracias por los que te han audado a tener fe (padres, catequistas, sacerdotes...) son mediaciones de Dios para ti.

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Quizás en las lecturas de hoy hay dos mensajes fundamentales: 1-. La salvación es para todos, para todo aquel que se abra a Dios, pertenezca al pueblo de Dios o haya estado alejado de cualquier religión. Lo importante es estar dispuesto a tener un encuentro personal con el Señor. Y eso cambia la vida. Pedro  estaba todo el día siguiendo a Jesús. Y cuando las cosas le fallan su fe, su confianza en Dios se vuelve pequeña (le dirá Jesús: ¡hombre de poca fe! ¿Por qué has dudado?) A esta cananea que tiene este encuentro hoy con Él, a pesar de las dificultades, de las dificultades que le pone Jesús para que crezca en convicción... sigue creyendo, fiándose de Jesús, de que Él es su salvación. Por eso le dirá Jesús Mujer qué grande es tu fe.... Y es que la fe se basa en ese encuentro personal con Jesús. No es memorizar oraciones, y pasajes bíblicos. No es cumplir unos ritos... todo eso es consecuencia de querer alimentar nuestra fe. La fe es mirar al corazón de Jesús, y dejarte mirar por el Señor, y fiarte de Él por muy difícil que lo veas. Es descubrir que Dios es el puerto que calma tu vida, que plenifica tu vida, que da sentido a lo que haces, sueñas y deseas. Por eso, no por muy buen ambiente cristiano que haya surgirá la fe, sino hay un encuentro de tu a tu con el Señor. El ambiente cristiano en la familia ayuda, crea ocasión... pero la fe es una opción personal, ... no son  costumbres, tradiciones, sino  una relación de tu a tu con Dios, en la que surge amistad, confianza, y necesidad de Él.

2-. El segundo aspecto es que Dios no nos lo quiere poner difícil, no quiere ponernos a prueba... sino que busca nuestro bien, nuestra solidez de corazón. Por eso a veces pone algunos escollos en nuestro camino para que ese esfuerzo, esa perseverancia, haga más fuerte nuestra convicción, nuestro amor a la verdad, a su gracia.  Si pudiéramos hablar así, podríamos decir que Dios está dispuesto a cambiar sus planes con nosotros si ve que nuestra necesidad, nuestra suplica hace un bien en nuestra vida, nos ayuda a ser más humanos, más coherentes, más trasparentes... Dios quiere dejarse vencer por nuestra oración sincera y de corazón.  A veces el Señor , por nuestro bien, por alimentar nuestra vida de lo que es importante utiliza un modo de obrar como es el silencio, la noche oscura. Pero siempre lo utiliza, para que nosotros crezcamos, para que nosotros fundamentemos nuestra vida en roca, y no en nuestras fuerzas, méritos o bondades realizadas. Así lo vivió la Madre Teresa de Calcuta, o san Juan de la Cruz, o santa Teresa de Jesús... 

Lo tercero es la misión de los apóstoles. En la fiesta de la Asunción decíamos que la misión del cristiano en este mundo es dar vida. Y esto se puede dar como lo hacía la Virgen : acompañando al que necesita ayuda, haciendo nuestro su dolor, siendo comprensivos, ofreciendo nuestra oración , siendo capaces de ponernos a su servicio, abriendo a la esperanza al otro, ayudando a ser mediación para que el otro pueda encontrarse con Dios. Hoy los discípulos hacen algo para dar vida a esta mujer y es la de convertirse en mediadores. No para convencer al Señor, porque Dios ya está convencido y sabe lo que necesitamos cada uno, sino para poner la necesidad del otro en manos del Señor y pedirle que nos ayude a descubrir que es lo que Dios pide de nosotros para ser sus instrumentos de amor para esa persona. Qué importante es que hagamos nuestro el mal ajeno y pidamos muchos al Señor que sepamos ver la situación con ojos de fe, y descubrir todos los caminos que Dios pone a nuestro alcance. 

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1-. Quizás una de las preguntas que intenta contestar estas lecturas es cómo y dónde encontrarnos con nuestro Dios. El se hace el encontradizo siempre. Y puede hacerse cercano en muchos momentos de nuestra vida. Pero tres lugares de encontrarnos con Él es: a) en la comunidad de creyentes. Como en el evangelio cuando dos o más se reúnen en el nombre del Señor, El está en medio de nosotros. De hecho en el evangelio es el conjunto de los apóstoles los que reconocen a Jesús (Realmente eres Hijo de Dios). No nos pide otro requisito más que reunirnos en su nombre y Él se compromete a estar , a subir a nuestra barca y calmar nuestras tormentas.; b) En los que necesitan ayuda. Allí se hace presente Dios. Como decía Mateo 25 (tuve hambre y me disteis de comer... lo que hicisteis con estos mis humildes hermanos conmigo lo hicisteis... En el evangelio Pedro necesitaba ayuda pues se hundía y Dios extiende su brazo para rescatarle. Los discípulos sentían que no podían navegar con tal viento en contra, y Dios se sube a su barca y todo vuelve a su calma... En la dificultad Dios viene a nuestro encuentro, para rescatarnos del sinsentido, de los miedos, de la tormenta... C) En la Oración: Jesús después de hacer la multiplicación de panes y peces, para darle el verdadero sentido a su acción, para no perder rumbo en su vida, se va a la montaña solo a rezar. Allí se encuentra con su Padre Dios. En la Oración nosotros nos encontramos con el Dios Padre que da sentido a nuestra vida y que nos ayuda a orientar nuestros esfuerzos y nuestro caminar, a colocar en su sitio nuestros miedos y dificultades, y a ser sensible por la necesidad del otr, incluso a sentir cómo Dios alienta nuestra vida..o

El 2º punto es a qué nos llama Dios en nuestra fe: Lo primero a lo que nos invita es a embarcarnos. La fe no nos ofrece una vida cómoda, tranquila,  de color de rosa. Todo lo contrario, cuando la vida se acomoda nos invita a embarcarnos a bregar contra vientos y  tormentas sabiendo que en la dificultad El viene a nuestro encuentro para subir a nuestra barca, para rescatarnos, para apaciguar la tormenta, para darnos certeza, para seguir sus caminos de vida. De hecho, hoy el Señor nos invita a buscarle (que ese es el camino de la fe) a tientas, sin seguridades, confiando en El. A veces parecerá que nos hundimos, pero El siempre nos ofrece su mano para sacarnos del embrollo, para reorientar nuestra vida, para superar nuestros miedos 

También nos pide que confiemos en Él, sobre todo cuando la vida se vuelve complicada, difícil, hasta el punto que parece no tener solución... Dios en esos momentos se hace presente. No de forma espectacular. Ni tampoco eliminando la dificultad, sino cambiando nuestra forma de afrontar la dificultad con nuevo vigor, con otra mirada esperanzadora, con un sentirnos arropados por aquel que nos comprende y sabe lo que necesitamos (así lo hizo con Elías en la Cueva, y con Pedro, y con los discípulos en el viento en contra) Dios nos pregunta:  "¿Por qué has dudado? Ánimo soy Yo , no tengas miedo" En medio de los oleajes de la vida, Jesús está con nosotros, no nos deja solos ante el peligro. El se convierte en nuestro escudo, en nuestros brazos, en el que sostiene nuestra vida. A pesar de nuestras dudas, de nuestra falta de fe... El sigue ahí con nosotros. 

También la barca que va en contra del viento nos recuerda a la Iglesia. Nos hace pensar en tantas comunidades cristianas que luchan contra viento  y marea, cada vez con menos fuerzas y sin ver resultados tangibles. Pero incluso en esa situación la barca no se hundirá, parecerá que es en balde el esfuerzo, pero Cristo solo nos pide que naveguemos, que breguemos con todas nuestras fuerzas, sabiendo que El viene a nuestro encuentro por encima del caos, del "mar"  . El se encargará de calmar la tempestad, de amainar el viento, de llenarnos de esperanza. Solo hay que reconocerle, pedirle ayuda y El se sube a la barca

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1-. Respecto a la primera lectura, la del profeta Isaías.  Nos invita a saciar nuestra sed y nuestra hambre yendo a Dios. El nos puede saciar de la felicidad. A veces estamos muy empecinados en comprar la felicidad donde no la vamos a encontrar. A veces la buscamos en tener un físico según los cánones de nuestro mundo de hoy  (y no nos acordamos que somos cuerpo y alma,. Puedes hacer mil dietas, puedes hacer ejercicio hasta extenuarte y estar en forma, pero si no tienes fuerte tu alma, si no te aceptas en tus errores, carencias y virtudes... nunca obtendrás la felicidad. Es como un pozo sin fondo que no nos sacia. Cuando estamos centrados en nosotros mismos, no hay fondo que sacie, siempre queremos más, necesitamos más. Cuando uno se centra en Dios, y por tanto Dios te orienta hacia el otro, hacia al prójimo... la felicidad viene intensa, plenificante, dando sentido a todo lo que vives, y dándote aliento para vivir). Hay alguien que nos da una felicidad completa. Ese es Dios. Y encima nos la ofrece gratis. No nos la tenemos que ganar. El ya la quiere regalar. Solo pide que tengas hambre o sed de El. 

2-. La segunda lectura de san Pablo a los Romanos es inspiradora y alentadora. S. Pablo tiene 3 convicciones: "Dios te ama"; "Cristo se ha entregado por mí, por amor , para salvarme"; y "Cristo está vivo". Por tanto si Dios me ama y Cristo ha luchado, lucha y luchará por mí porque me ama, porque está vivo, porque quiere darme su salvación.... ¿A qué tengo que tener miedo? Nada, ni nadie me puede separar del amor de Dios. Porque yo puedo fallar (y lo hago) pero Dios no me falla nunca, me busca, me quiere, me sostiene... por tanto ni muerte, ni vida, ni enfermedad, ni paro, ni crisis... nada puede con el escudo que Dios me da ofreciéndome su amor para siempre. No puede haber miedos, y si los hay es porque no confío suficientemente en Dios, en que su amor lo puede todo.

3-. El evangelio quédate con esas frases: a)-."Se compadeció de la multitud y curó a los enfermos": compadecerse es hacer mío el sufrimiento ajeno, acompañar al que sufre y ayudarle a salir de su situación. No es un mero sentimiento, sino compromiso con el otro, con su bien, con cargar con su dolor... b)-. "Despide a la multitud... no hace falta , dadles vosotros de comer...Traedmelos" A veces queremos quitarnos los problemas, queremos pasar sin que los problemas de los otros nos toquen. Y Jesús nos invita a no desaparecer, a no desentenderte del problema del otro. Es cierto que a veces tenemos pocos recursos o medios. Jesús no nos pide que lo resolvamos con nuestros recursos, sino que nos impliquemos y que le presentemos nuestros pocos recursos, y El hará que se multiplique los recursos, las ocasiones de solución, las mediaciones... Sólo pide "mójate con tu hermano, su problema es tu problema y Yo te daré lo que necesites para acompañar la necesidad del hermano."

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1-. Las dos primeras parábolas nos invitan a descubrir cómo el encuentro del creyente con Dios es un encuentro gozoso es como ese tesoro descubierto que cambia tu vida a mejor, que necesitas tenerlo y que da un nuevo rumbo a tu vida hasta el punto de valorar todo lo demás como insignificante o de menos valor. A veces ponemos el foco en la segunda parte de las dos parábolas: ("y vendieron todo para comprar...; vende todo lo que tiene y la compra...") Cuando todo eso es consecuencia de la alegría de haber encontrado algo o mejor dicho alguien que te hace vivir con otro sentido, con otro vigor. A veces los creyentes ponemos demasiado el acento en el sacrificio a realizar por seguir a Cristo, cuando debería ser todo lo contrario: tenemos tanta alegría, tanto entusiasmo que nos surge desalojar de nuestra vida aspectos para que luzca más ese Dios que hemos encontrado, para que inunde más ese manantial de vida nueva que hemos experimentado. Si viviéramos nuestra relación con Dios de esa forma, ¡Cómo cambiarían las cosas!, ¡Cómo contagiaríamos entusiasmo, ganas de experimentar ese gozo!, ¡Cómo cambiaría nuestro entorno a mejor! No habría miedo al tan temible "Por si acaso..." o al "Qué pensaran si hago ..."

2-. Si nos ofreciera Dios la misma oferta que a Salomón ... ¿Qué contestaríamos?. Seguro que lo que decimos en la noche de fin de año (salud, amor, suerte en la vida, felicidad...) Cuando lo que nos descubre esta primera lectura es algo tan esencial para un creyente. Cuando tienes a Dios en tu vida, cuando en tus entrañas tienes esa mirada de la vida que Dios te enseña todo lo demás se te da por añadidura. Si tienes esa sabiduría de Dios (que es saber ver la realidad con los ojos de Dios, descubrir el bien que toda realidad contiene, saber mirar con misericordia, y con paciencia la vida....) todo lo demás es posible. Con esa mirada incluso en la enfermedad uno puede encontrar felicidad, sentido en su vida, fuerza para descubrir que es una bendición porque Dios tira contigo y te ayuda a sostener tu esperanza y tu vida. Cuando uno tiene a Dios en su vida, incluso en medio del contratiempo y la dificultad es capaz de encontrar serenidad, porque se sabe arropado por Dios, y sabe que Él puede transformar un mal en un bien en el momento adecuado.  Hay una oración que viene muy bien a este tipo de sabiduría, pues al final es dejarse guiar y orientar por el Señor. Ojalá que podamos vivirla y no se quede en palabras: "Señor dame serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar. Dame fortaleza para afrontar lo que sí debo cambiar. Y dame sabiduría para saber la diferencia".

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1-. Si hay dos actitudes que destaca la primera lectura y el evangelio es la paciencia. Dios cree que el justo tiene que ser humano, tiene que ver no solo lo malo de la otra persona (la cizaña) sino también el trigo que está creciendo en la vida del prójimo (como lo ve Dios en nosotros) Decía un autor que al final de los tiempos habrán muy pocos completamente  buenos y muy pocos completamente malos. Todos tenemos bondad y maldad en nuestra vida y en nuestras reacciones. Y si Dios espera , tiene paciencia, cree en nosotros, es capaz de destacar más el trigo que la cizaña, como no hacerlo nosotros con el prójimo. Además la segunda actitud es la Tolerancia. Cuando se descubre así (con trigo y cizaña) es más condescendiente con el otro, y más exigente consigo mismo. A veces se nos derrumba la tolerancia con el otro porque nos fijamos en el pasado. Dios nos enseña a no fijarnos en el pasado, sino en el presente y futuro. A veces nos obnuvila lo que dijo, hizo, permitió... nada de eso se puede cambiar. Dios apuesta por las posibilidades que tenemos en nuestro presente, y los caminos que nos presente en el futuro., De hecho cuando Dios mira a un pecador , no mira el pecado cometido, sino el hijo debilitado que necesita su salvación, que necesita que le sane, que le restaure su esperanza, su ser hijo de Dios, que necesita que alguien le ayude a reconducir su vida. Los cristianos tendríamos que verlo así también.  

2-. Un segundo aspecto es la fuerza que tiene el Reino de Dios y los tiempos de Dios que la mayoría de veces no son nuestros tiempos. Las parábolas del Reino escuchadas hoy nos da serenidad, porque su crecimiento no depende de nuestras obras, de nuestro empeño... sino que su fuerza es el Espíritu de Dios que viene a asistir nuestra debilidad. El Reino de Dios (que no es un lugar, no es una nueva dimensión... sino una nueva vida que ya está cuajando) crece por sí mismo, y no parará de crecer. Es cierto que crece desde la raíz y por tanto oculta a nuestros ojos. Solo vemos las consecuencias de ese Reino de Dios que crece sin parar (la gente que es generosa y se preocupa de otros, pese a tener él problemas, gente que es capaz de perdonar , aun sintiendo la herida del mal recibido, gente que desprende bondad y serenidad, en medio de situaciones complicadas... es germen del Reino de Dios. Nuestros actos pueden facilitar el crecimiento, pero nuestros errores no van a hacer parar ese Reino de Dios que sigue robusteciéndose en nuestro mundo. Además en un mundo donde todo lo queremos al instante y si no pierde valor, o lo ninguneamos, Dios nos enseña a saber esperar, a descubrir que sus tiempos son eficaces, que sus ritmos no son nuestros ritmos, pero sana más, es más eficaz, y fermenta de bondad y esperanza toda la masa. Dios apuesto por lo humilde, y como eso humilde sin que nos demos cuenta va realizando una transformación de la realidad, como la levadura, como el grano de mostaza, que a su tiempo cobija las aves... Las prisas en lo humano no son buenas consejeras. Aprendamos de Dios de su paciencia, de su fe en nuestra conversión (hasta el último momento como el Padre del Hijo pródigo, o como Cristo en la cruz con el Buen ladrón) de su indulgencia con el que yerra...

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REFLEXIÓN DE LA SEMANA

1-. El Evangelio y la primera lectura están unidos por un tema esencial para conocer los caminos del Señor que es la humildad, la sencillez. Jesús nos regala esta oración en la que da gracias al Padre porque todas estas cosas las revela a los humildes, a los pequeños. Ser humilde implica abrirse a Dios, dejarnos guiar por Él, tener ganas de aprender de Dios cada día, No arrogarnos la capacidad de ser autosuficientes, no apoyarnos en nuestros méritos... Dios no puede entrar en tu vida si estás muy lleno de ti, de tu ego. Dios tampoco quiere imponerte sus caminos. No quiere criados que simplemente obedezcan, quiere hijos, que compartan su vida, sus sueños. Si queremos conocer cada día más a Dios, descubrir su voluntad en nuestra vida, necesitamos ser humildes en nuestra vida y en nuestra mirada, descubrir que sin Dios la vida se vacía de sentido, de humanidad... ¿Es así? ¿De qué te tienes que vaciar para dejar entrar más a Dios en tu vida?

2-. En el evangelio se habla de "Yugo", que es llevadero y ligera su carga. La propuesta de Jesús es exigente, pero cuando uno la acepta, la asume y la intenta vivir, descubre que te da "alas" , te da fortaleza para afrontar la vida; te da coraje para desalojar miedos  (el que dirán, el fracasar, la soledad...) La propuesta de Jesús se basa en "amar" entendiendo este amor como servicio, entrega, donación. No  es un amor de sentimiento, de estar bien uno, de hacer crecer el ego... Cuando vives ese amor de Jesús que es exigente porque te invita a perdonar, a entregarte, a cargar con el sufrimiento del prójimo,... te puede parecer una carga difícil de llevar. Pero con el tiempo te das cuenta que es una carga llevadera, porque Cristo te acompaña, porque Él te ayuda a llevar esa carga, porque ese amor va iluminando tu vida y te va llenando de fortaleza en cada problema que surge. ¿Te atreves a llevar esa carga? Solo se descubre que es llevadera, cuando la vives, cuando te fías de Dios. ¿Lo haces?

3-. El tercer punto es sobre como el Señor nos descansa cuando acudimos a Él. El no nos va a resolver el problema, sino que nos va a dar coraje, esperanza, inspiración para afrontar la vida, sabiendo que no cargas tu solo sobre tus hombros el mundo, sino que Él carga contigo tu pesar, te alivia porque pase lo que pase, sigue confiando en ti "CREYENDO EN TI" amándote por encima de tus éxitos o fracasos, de tus "meteduras de pata, o tus aciertos. Y eso te libera, te hace levantarte, te hace descubrir nuevas mediaciones que pone en tu vida para apoyarte... y te sigue valorando por quien eres (su hijo) y no por lo que haces. ¿Has probado poner tus problemas en sus manos?

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Reflexión para esta semana

Esta semana tendríamos que celebrar el Domingo XIII T.O. pero en nuestra Diócesis de Valencia  desde hace varios Obispos se ha querido celebrar con más intensidad esta fiesta, llevándola al fin de semana más próximo al 29 de Junio. Por este motivo tenemos una ocasión para descubrir lo que nos aporta estas dos grandes figuras en la Iglesia (pilares de nuestra Iglesia) y cómo vivimos nuestro ser Iglesia. Por eso meditemos estos tres puntos: 

1-. Pedro y Pablo con su historia para seguir a Jesús nos recuerda que Dios no nos pide no fallarle, sino dejarnos sanar por Él. Tanto Pedro, como Pablo fallaron al principio a Dios. Poco a poco dejaron de confiar en sus fuerzas, y comprendieron que eran fuertes cuando se abrían a Dios, cuando se dejaban interpelar por Cristo, cuando su vida se centraba en el Señor. A nosotros nos pasa lo mismo. Grietas en nuestra vida vamos a tener, pero por eso y por encima de eso nos quiere el Señor. El simplemente nos pide que le amemos, que le dejemos entrar en nuestra vida y El nos restaura, nos hace crecer, nos hace afrontar cualquier dificultad dándonos su fortaleza. 

2-. Pedro y Pablo nos recuerda que la riqueza de la Iglesia es  la diversidad de dones. Tanto Pedro, como Pablo fueron muy diferentes a la hora de anunciar la fe. Pero ambos les unía su gran amor por el Señor, sus ansias de anunciar el Reino de Dios y mostrar que el que confía en Cristo nunca se sentirá decepcionado. Pedro centrado en confirmar la fe de sus hermanos. Pablo centrado en abrir la fe a los gentiles. Cada uno con distintos temperamentos, con distintas cualidades, pero haciendo que la Iglesia fuera lugar de encuentro para los que querían seguir a Jesús. Como decía san Agustín, en lo sustancial todos unidos, en lo opinable que haya diversidad. Nuestra Iglesia tiene mucho que aprender de esa forma de complementarse. 

3-. Pedro y Pablo nos recuerda algunas esencias de nuestra Iglesia. Nuestra Iglesia la edifica el Señor. El la cuida, El la sostiene, El la guía. A veces no confiamos del todo en que Dios es el que vela y guía a su Iglesia a pesar de su debilidad. El nos da fortaleza para ser sus instrumentos en cada época. También nos recuerda que la Iglesia debe ser una comunidad de hermanos, abierta, acogedora, a veces con tensiones, y dificultades para convivir, pero siempre sostenida por el perdón y la reconciliación. La Iglesia debe ser como decía Juna XXIII esa fuente en medio de la plaz del pueblo que refresca a todo aquel que se acerque a ella acalorado y sediento. La Iglesia tiene que mostrar esperanza, comprensión, tiene que mostrar que las que la formamos no somos intachables sino que somos una comunidad de pecadores perdonado y eso es lo que nos da fortaleza para seguir creciendo. 

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LIBROS...

Reflexión para esta semana

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REFLEXIÓN DE ESTA SEMANA

REFLEXIÓN PARA MAYORES 

RECURSOS PARA NIÑOS 

LIBROS A MIRAR Y A LEER

Piensa y Reflexiona este Domingo

Recursos para reflexionar los adultos

Recursos para niños

LOS MEJORES HIMNOS DE LAS JORNADAS MUNDIALES DE LA JUVENTUD

REFLEXIÓN PARA ESTA SEMANA

RECURSOS PARA REFLEXIONAR LOS ADULTOS

RECURSOS PARA NIÑOS

REFLEXIÓN PARA ESTA SEMANA

AYUDA PARA REFLEXIONAR LOS ADULTOS

RECURSOS PARA NIÑOS (ASCENSIÓN)

PREGUNTA A TU IGLESIA

CUENTOS DE JORGE BUCAY

PIENSA Y REFLEXIONA...

1-. En la segunda lectura Pedro quiere sostener la esperanza de los creyentes en tiempos difíciles. Pedro quiere recordarles que como creyentes y seguidores de Jesús tienen que tener un comportamiento correcto,  un comportamiento evangélico ejemplar pues nuestra conducta muestra a Cristo. A pesar de poder tener una experiencia de oposición, de contradicción con la realidad, esto no puede convertirse en excusa para tener un comportamiento impropio. En toda circunstancia los discípulos de Jesús deben distinguirse por hacer el bien. ¿Te distingues en tu día a día por hacer el bien? ¿Esto lleva a cuestionar a otros sobre quien te mantiene en esa actitud?

2-. En el evangelio Jesús está despidiéndose de los discípulos en la última cena y les recuerda que aunque se vaya junto al Padre, no les abandonará. A veces, como aquellos discípulos, el creyente puede sentirse solo y tener sensación de vacío en su interior. Podemos experimentar la ausencia de Jesús en muchos momentos y la soledad. Pero Jesús nos invita a abrir los ojos con la fe. Y descubriremos la presencia del Resucitado. El nos ayuda dándonos el Espíritu paráclito, cuya función es proteger, defendernos y consolarnos. Cuanta más fe, más descubres al resucitado y más experimentas ese sostén del Espíritu... En este confinamiento ¿has descubierto esa presencia del Espíritu en tí en el pobre, en las buenas acciones, en la vida y en los actos de generosidad...?¿Y en ti, lo has descubierto?

3-. También nos pide hoy que nos dejemos conducir por este Espíritu  para que nos ayude a encarnar nuevas maneras de hacer presente la Buena Nueva de Jesús. Hoy nos pide no quedarnos en lo confortable de la norma, la costumbre o el camino hecho. Nos llama a sacar del templo nuestra fe, para vivirla, sin miedo, a campo abierto... ¿Cómo vas a vivir tu fe en estos próximos meses?

Ayuda para cristianos adultos

Para trabajar con los niños el Domingo 6º Pascua

Cine y videos para el alma

Para leer ...

Cuentos de Jorge Bucay con un trasfondo para el alma

Cuando hagas una obra buena, no la hagas para llamar la atención. Cuando des limosna, no alardees; que tu mano izquierda no sepa lo que hace al derecha. Cuando ores, no seas palabrero, no lo hagas para que te vean: entra en el secreto del corazón y ora allí al Padre. Cuando perdones, no pongas medida, no escatimes; la medida que uses la usarán contigo, (al menos Dios). Cuando ayunes, no pongas cara triste; arréglate bien y que no se note; lo nota Dios. Cuando vivas de apariencias o para aparentar, no tiene valor. Lo bueno, lo que vale, lo que es verdadero está y sale del corazón. 

Cuando quieras hablar con Dios Padre di: Padre nuestro que está en el cielo, santificado sea t...

DESESCALADA EN LA IGLESIA

MES DE MAYO ... MES DE MARÍA

REFLEXIÓN PARA EL DOMINGO

2-. Seguir a Jesús es un ejercicio de confianza. Confianza en que El nos precede y nos guía. Confianza en que el servicio a los demás es el verdadero camino o la puerta que lleva a la VIDA. ¿Cómo estás sirviendo a los que están próximos y a los lejanos?

3-. Un director de unos ejercicios dijo: " El cristiano no debe ser optimista, sino que debe ser ESPERANZADO. En las pruebas verdaderamente graves, la certeza de que la lucha por seguir adelante tiene sentido solo puede residir en Dios, que nos ama y no nos abandona. Tener esperanza no es convencerse de que Dios va a quitarte el mal, ni tener la fantasía ilusa de que todo saldrá bien si lo deseamos con fuerzas...sino que Dios conduce hacia el bien, incluso en la "noche oscura" ( y como ejemplo Jesús que de la muerte saca vida, por eso:, pregúntate ¿Eres optimista o esperanzado?

Reflexiones para esta semana 5ª de Pascua 

Recursos para niños 5º  Pasc

DIEZ MINUTOS DE ORACIÓN CON EL SEÑOR

CAMPAÑA DE COLABORACIÓN CON LA IGLESIA

coro católico                                                   "VERBUM PANIS"

LA MISA PARA LOS NIÑOS DE COMUNIÓN

PIENSA EN ESTE DOMINGO

1-. En la segunda lectura san Pablo dice: "Si obrando el bien soportáis el sufrimiento, hacéis una cosa hermosa ante Dios". No se trata de sufrir por sufrir, sino aceptarlo y padecerlo pero como algo necesario para poder alcanzar el bien. Pues ellos se convierten en reflejo de Dios. Nos enseñan a comprometernos y descubrir que vale la pena "jugársela" por hacer un bien que beneficiará a otros seamos conscientes o no.  ¿Por qué bien estás entregado y eres capaz hasta de padecer para que se haga realidad?

2-. Dice el Evangelio "He venido para que tengan vida y vida en abundancia". A Dios no hay que tenerle en cuenta por si acaso, sino que Dios es alguien que hace vivir, incluso en los momentos más adversos, alguien que da fuerzas para comenzar siempre de nuevo. ¿Qué vida te hace vivir Dios? ¿Da un sentido nuevo a lo que haces? ¿Quizás lo tenemos como un bonito cuadro a quien mirar de vez en cuando, o lo tenemos como alguien que te remueve por dentro y te invita a caminar de forma diferente?

3-. "Yo soy la puerta" El es al puerta como es la Palabra, la Verdad, el camino, el pan de vida. Para ello tenemos que entrar por Él, creer en Él, fiarnos de lo que nos muestra. En la puerta de mi corazón ¿qué dejo entrar y que no?; ¿Dejo entrar todo lo que implica seguir, fiarme y caminar con Jesús? ...

Recursos para niños Semana 4ª Pascua

Domingo 3º Pascua

Los discípulos de Emaús caminan con tristeza y desaliento. Las esperanzas puestas en Jesús se han desvanecidos porque lo que están viviendo no es como ellos lo imaginaban. Están derrotados y sin esperanzas porque creían creer y no creen . Jesús les tare a la sencillez alegre de creer sin sueños irreales y sin miedos

Los dos discípulos iban pasando de la tristeza a la alegría, de la indiferencia al amor. La Palabra de Dios les iba transformando, pero no era suficiente, necesitaban encontrarse con el amor de Dios y eso se refleja como en ningún lugar en la Eucaristía. Solo el amor les conduce a la fe, a reconocer a Jesús.

A Dios no le gusta ser conocido por miedo o por interés. Le gusta ser conocido por amor. Y sólo desde el amor le podemos reconocer ¿Y tú, le reconoces hoy en tu vida?

La nueva Hoja Parroquial para estos 15 días

Desde el 26 de Abril hasta el 9 de Mayo

Todos los días un toque de campanas a las 12,00h. 

Uniéndonos a la Diócesis todos los días tocarán las campanas para rezar el ángelus y hacer un responso por los difuntos en este tiempo 

1-.El Ángel del Señor anuncio a María; Y concibió por obra del Espíritu Santo. Dios te salve, María......

2-. Aquí está la esclava del Señor; Hágase en mi según tu palabra. Dios te salve, María ......

3-. Y el Hijo de Dios se hizo hombre; Y habitó entre nosotros. Dios te salve, María ......

Ruega por nosotros Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

Derrama, Señor, tu gracia sobre nosotros, que, por el anuncio del Ángel, hemos conocido la encarnación de tu Hijo, para que lleguemos, por su pasión y su cruz, y con la intercesión de la Virgen María, a la gloria de la resurrección. Por Jesucristo, Nuestro Señor. Amén

Oración por los difuntos: Escucha, Señor, nuestras súplicas y haz que todos nuestros hermanos, que han salido de este mundo, gocen junto a ti de la vida inmortal; y, cuando llegue el gran día de la resurrección y del premio, colócalos entre tus santos y elegidos. Concédeles gozar siempre de tu paz. Que encuentren en ti el perdón de sus pecados. Que gocen eternamente de la felicidad de los santos. Que te contemplen a ti, luz verdadera, y gocen de tu presencia. Conforta a sus familiares y a cuantos lloran sus muertes y mantenles en la esperanza de la Vida eterna. R/. Amén

MÚSICA PARA LA FE

Actividades niños para el 3º Domingo de Pascua

A veces  pensamos que Cristo está muy lejano a nuestras preocupaciones, nuestras contrariedades, o nuestros dolores. Pero en esos momentos tenemos que recordar 3 cosas: 

Cristo nos prometió acompañarnos todos los días de nuestra vida (no sólo los buenos, donde es fácil creer, sino todos los días, sobre todo los malos, los que se tuercen ... ahí en especial está Cristo haciendo de nuestro escudo o parando múltiples golpes que nos puede hacer caer en más desorientación

A Dios le gusta gastar el silencio. Es un lenguaje que nos cuesta, pero cuando dejamos que el silencio entre en nuestro corazón , entonces empezamos a escuchar a Dios. Y para ello la oración es fundamental

Ten en cuenta que es en los momentos difíciles cuando se muestra si tu fe es madura, fuerte. Es en esos momentos donde se debe demostrar tu confianza en el Señor. En los momentos fáciles cualquiera puede confiar.

Lectura de libros que inspiran

En este SEGUNDO DOMINGO DE PASCUA nos invita el Señor a : 

- "No tener miedo". Si Cristo entra en nuestra vida, El nos inunda de su paz... pero tienes que dejar que entre en tu vida con tus reparos, dudas, miedos...

- Necesitamos "Un encuentro personal con El". No nos es suficiente que nos diga dónde está Jesús, y quién es Jesús... necesitamos encontrarnos con El: en el pobre, en la Eucaristía, en la Palabra de Dios, en la comunidad cristiana reunida.

- Hoy hagamos como Tomas y creamos en Cristo a pesar de nuestros miedos: Creer nos ayuda a ver que es posible el amor de Cristo, que es servicio y entrega y la paz, que es buscar lo justo para el otro

MÚSICA PARA LA FE

Actividades niños para el 2º Domingo de Pascua

Seguimos celebrando la Pascua

No dejes que este tiempo pase desapercibido por tu casa: 

- Intenta rezar una vez a la semana el Vía Lucis (como el vía crucis pero en encuentros de Jesús con los discípulos en la Pascua)

- Adorna la Biblia poniendo a su alrededor signos pascuales: pan y una copa de Vino; un pequeño cuenco con agua (simbolizando nuestro bautismo), siete llamas de papel esperando Pentecostés (la venida del Espíritu Santo)

- Pon cada semana un signo pascual y explícaselo a tus hijos o busca el significado (1 semana Alfa y omega; 2ª sem. el pez (ichthys, en griego ΙΧΘΥΣ, ['ix.θys] "pez"); 3ª sem. el Pelícano; 4ª sem. El Buen Pastor; 5ª sem. el Crismón ; 6ª sem. el ancla; 7ª sem. el cordero encima de un libro con 7 sellos) 

Actividades niños para Pascua

¡¡¡VIVE LA RESURRECCIÓN!!!... 

MUESTRA QUE CRISTO SIGUE VIVO EN NOSOTROS VIVIENDO SU MISMA VIDA Y AMANDO COMO EL AMÓ